FRANQUEZA

Juan 4:7 Pues mirad, habla públicamente, y no le dicen nada.
¿Habrán reconocido en verdad los gobernantes que éste es el
Cristo?
7:27 Pero éste, sabemos de dónde es; más cuando venga el Cristo,
nadie sabrá de dónde sea.
7:28 Jesús entonces, enseñando en el templo, alzó la voz y dijo: A
mí me conocéis, y sabéis de dónde soy; y no he venido de mí
mismo, pero el que me envió es verdadero, a quien vosotros no
conocéis.
7:29 Pero yo le conozco, porque de él procedo, y él me envió.
7:30 Entonces procuraban prenderle; pero ninguno le echó mano,
porque aún no había llegado su hora.
Tengo un buen amigo a quien aprecio mucho, y quizás lo que más
valoro de él es su franqueza. Siempre que me comunico con él
para pedirle su opinión sobre algún asunto, me responde: “No me
pidas mi opinión a menos que quieras oírla. No voy a tratar de
imaginar qué deseas escuchar. Te diré lo que pienso realmente”.
En una sociedad en la cual todos se ofenden por la mínima
situación, su franqueza es renovadora. Esto también caracteriza a
un auténtico amigo.  Los amigos probados nos dicen la verdad con
amor, aunque no sea lo que queramos escuchar.
Como declara el proverbio: “Fieles son las heridas que causa el
que ama” (Prov. 27:6).
Es por eso que, sin lugar a dudas, Jesús es el amigo más
maravilloso de todos. Cuando se encontró con la mujer junto al
pozo (Juan 4:7), rehusó entrar en una discusión sobre cuestiones
menores, y se centró en necesidades y asuntos más profundos que
pesaban en su corazón. La desafió exponiendo las cualidades del
Padre celestial y, con amor, le habló de los sueños rotos y las
decepciones que había experimentado.
Estimado amigo (a)… En tu andar diario, permite que Dios te hable
con franqueza a tu corazón a través de su Palabra. Jesús es
nuestro gran amigo, y un verdadero amigo nunca te va a engañar,
así es Jesús.
Sé humilde, reconoce tus errores y deja que su gracia te ayude
aun cuando todo parezca perdido.

Por esta razón el proverbista escribió… “El temor del Señor es la
enseñanza de la sabiduría, y antes de la honra está la humildad”
(Proverbios 15:33).

Hno. Gunder.